¿Qué es el Agile y las metodologías ágiles de gestión de proyectos?

Agile se puede definir en pocas palabras:

  • Valor para el cliente
  • Adaptación a los cambios
  • Mejora continua
  • Trabajo en equipo enfocado a la generación de valor.

El Agile nace en el 2001 con el Agile Manifesto. Fue escrito por un conjunto de desarrolladores de software que buscaban nuevas maneras de llevar a cabo esos proyectos. Lo que se entiende por Agile, podría decirse que son unos principios generales para adaptarse a los turbulentos mercados centrados en el cliente.

Aunque esta línea de acción se haya desarrollado durante años en el entorno del desarrollo de software, los principios son de aplicación en cualquier ámbito. La industria de fabricación ha sido un sector que paulatinamente se ha orientado hacia esos principios ya que la demanda de sus mercados se está transformando, siendo cada vez más cambiantes.

Agile aparece para responder a las necesidades del cliente, para tener capacidad de reacción ante cambios, para orientarse a lo que es importante para el cliente y para aprovechar las potencialidades de los equipos. Esto se plasma en los 4 valores del Agile que derivan en los 12 principios que explican el pensamiento ágil:

Bajo estos principios, multitud de equipos de desarrollo empezaron a cambiar sus métodos de trabajo en busca de un nuevo paradigma..Las diferentes expresiones de estos enfoques fueron cristalizando y definiendo lo que se conoce como metodologías ágiles. Hay todo un universo de estas metodologías orbitando alrededor del desarrollo de software. Hay quién las ha recontado y explica que se pueden encontrar entre 40 y 70 metodologías diferentes derivadas del pensamiento Agile. A pesar de ello, hay metodologías que pueden adaptarse fácilmente a entornos distintos como Scrum y Kanban.

¿Qué metodologías ágiles se pueden aplicar en la industria?

En realidad podríamos aplicar cualquier metodología en un entorno industrial. A pesar de ello, las más utilizadas son Scrum y Kanban.

Scrum es una metodología muy adaptada a entornos inciertos, en los que la evolución de los proyectos es cambiante en todos los aspectos. Scrum es utilizado por equipos de desarrollo de producto en los que la estructura, características y magnitudes de los proyectos difieren de manera significativa de un caso a otro.

Scrum tiene una metodología que define los roles que tienen que haber en los equipos, la manera de organizar el trabajo, una secuencia de cada período de desarrollo y cómo realizar seguimiento y mejoras del resultado.

Kanban es otra metodología muy utilizada en industria que se adapta bien a flujos de valor definidos en los que la irregularidad viene introducida por las características y magnitud de los proyectos.

Kanban es un entorno poco prescriptible, lo que significa que obliga a poco a la hora de su puesta en marcha. Esto le hace una metodología versátil y de amplia aplicación.

Las claves de una implementación Agile

En cualquier transformación a una estructura AGILE nos vamos a encontrar:

  • Cambio de una estructura departamental a una organización basada en equipos auto-gestionados.
  • Equipos motivados que integran todas las capacidades necesarias para llevar a cabo el trabajo encomendado.
  • Enfoque basado en la colaboración con el cliente y una entrega de valor rápida y constante.
  • Adaptación a los cambios generada a partir de procesos robustos y no de esfuerzo de las personas.
  • Desarrollo sostenible y continuo de los equipos
  • Seguimiento y medición del flujo de valor.